domingo, 19 de febrero de 2017

EL MONUMENTO A LA INTOLERANCIA

A unos días de haber iniciado su gobierno Donald Trump, firmó el decreto donde pide ampliar y reforzar el muro construido en la frontera con México, a pesar de que esta cerca inicio su construcción con George W. Bush en 2006 para detener el flujo de inmigrantes, a diferencia de la propuesta de Trump, quien además ha dicho que el mismo será pagado por México, el muro que de por si era indignante ahora es más lascivo , ya que la barrera busca dividir a Estados Unidos del resto de América Latina de forma física, y lo hace acompañado de una serie de medidas de deportación que busca expulsar de la unión americana a millones de trabajadores indocumentados.

El muro busca dejar en claro la barrera económica y política pero sobre todo social que Trump ve con el resto de los países; lo que pretende no es detener el flujo de la gente que busca mejores oportunidades laborales y mucho menos se ha puesto a pensar que eso afectara la economía de su país, sabemos que los miles de mexicanos que después de pasar serios peligros cruzan la frontera, lo hacen para ir a cultivar sus campos, construir sus casas, cuidar a sus hijos y apoyar domésticamente a sus familias, la medida es por demás abusiva, intolerante y racista



Ahora las personas que sean detenidas bajo cualquier argumento serán deportadas; regresarán a México sin nada en las bolsas, porque todo lo que posean se quedará en EE. UU. y nada de todo su esfuerzo será recompensado. Sin duda deben sentirse frustrados y algunos con sus sueños rotos, tristeza debe haber en sus corazones de pensarse separados de sus familias.

Socialmente los mexicanos tendremos que afrontar una nueva realidad, ya que muchos paisanos tendrán que reiniciar a forjar sus esperanzas y sus familias deberán adaptarse a nuevas situaciones, como el aprender en un sistema educativo mexicano, muy distinto al que existe en el país del norte.

Esto debe ser una llamada de atención para el gobierno de México, quien debe asegurar mejor educación y mayor estabilidad económica a los mexicanos, debemos dejar de lado que las remesas económicas, que se envían de la unión americana, sea una de las principales fuentes de ingresos en México. Por el contrario, esperamos que se generen circunstancias favorables para que las nuevas generaciones puedan tener acceso a empleos mejor pagados en el país y dejar de buscar un alivio monetario en países vecinos.

Tal vez el muro de Trump no fuera tan erróneo como pensamos, si con ello Estados Unidos dejara de vender armas a los cárteles de drogas en México, porque si hay un serio problema en mi país de violencia, por lo que muchas familias emigran, es gracias al alto consumo de drogas que los estadounidenses tiene y por los intereses que su gobierno tiene en ello. Donald Trump debería preocuparse menos de lo pasa en los países latinoamericanos en materia política y enfocarse en hacer políticas públicas para prevenir y desalentar en sus jóvenes el consumo de drogas.

Lo indignante como mexicano no es el derecho que el presidente de EE. UU. tiene de deportar a indocumentados de su país, sino que lo hace bajo el estigma de que los mexicanos que están en su país son delincuentes y como tal serán tratados. Me pregunto ¿dónde están las voces de los organismos internacionales de Derechos Humanos y todas las organizaciones que dicen cuidar del bienestar de las familias? ¿Dónde queda la fraternidad entre hermanos de ambos países? Por desgracia poco se ha escuchado de ellos.

Como masones mexicanos, basados en nuestra máxima Libertad-Igualdad-Fraternidad, nos promulgamos en contra de cualquier acción que cuarte la libertad, atente contra la igualdad y menoscabe la fraternidad entre las naciones y los individuos.

“Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la Paz”

Benito Pablo Juárez García.



Fraternalmente
C.·.  Mata
Respetable Logia JANO No. 12, Or.·. de Orizaba, Veracruz
Jurisdiccionada al G.·.L.·.M.·.A.·.E.·.